Toda estación base, también conocida como BTS (del inglés) para abreviar, requiere un marcado adecuado de los hilos y cables que transportan y distribuyen la señal del operador.
Tanto los armarios de potencia, ópticos y de transmisión como los transceptores, que pueden montarse en el interior o a gran altura sobre el suelo en mástiles de telecomunicaciones, son responsables del buen funcionamiento de una instalación de este tipo.
Todos estos componentes, conectados mediante cables de CC, FO y RF, requieren un marcado claro, duradero y resistente a la luz y el tiempo.